No conozco personalmente Corea del Sur, pero aprovechando que mi primo Juanan se ha ido para allá a hacer las Américas, y que su hermano Diego se ha acercado a visitarle, le he pedido a este último su visión de aquello, y a través de sus fotos y comentarios voy a escribir esta entrada.
Seul, inmensa ciudad de unos 10 millones de habitantes, tiene sus contrastes, pasando desde una catedral a los rascacielos, sin olvidar sus mercados tradicionales ni su peculiar gastronomía.
Aunque parece que ya no es fácil de encontrar, se sigue cocinando el perro, en una especie de caldereta, a la que llaman Bosintang........y se siguen promulgando sus importantes beneficios vigorizantes (según dicen, en todos los sentidos).
Son muy de "barbacoas" : mesas preparadas con brasas........y acompañado de "soyu" (licor de arroz de sabor suave y unos 18º, fácil de beber según me comentan) o "macoli" (fuerte cerveza de arroz, de color lechoso, y cierto sabor a clamoxil).
Al más puro estilo mediterráneo, en Corea tienen su propio Benidorm : Busan; ciudad playera de unos 4 millones de habitantes, muy animada y turística......digna de ver la Busan Tower y el mercado de pescado de Jagaichi.
Pero volviendo a las exquisiteces culinarias del país, no hemos de dejar sin mencionar la piel de cerdo (¿torreznos?), pie de cerdo (¿manitas?), gusanos,.....
Pero por encima de todo, y aquí sí me podeis llamar clásico, lo de aspecto más asquerosillo es el pulpo vivo (no dejeis de entrar en Facebook, en mi página, a ver un corto video) : más bien, recien muerto, se sirve crudo con pimentón y vinagre, y tras moverse cual rabo de lagartija, termina de morir en un par de minutos........
He de confesar que no es de los países que más me atrae para visitar, pero no cabe duda, que de alguna forma es diferente.............
Gracias Diego.
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