Posiblemente, algo que no me esperaba encontrar en La Boquería este pasado sábado, aunque algo había leído al respecto..........porque allí, en este mercado junto a Las Ramblas, se come en la barra, en un taburete, de tapas, a veces sin complicarte. Pero estaba equivocado, y no porque crea que comer y picotear en una barra no pueda suponer comer bien, sino porque mejoró todo lo imaginable.
Como rezan los manteles de papel sobre los que comes : "El arte de comer en un taburete". Y no porque haya que hacer equilibrios, sino por lo que se disfruta plato tras plato, bocado a bocado.
Y la atención, no se queda atrás. Comenzó a atendernos Marcos, que estuvo atento en todo momento a nuestras peticiones de viandas, para luego sentirnos fenomenalmente atendidos por el propio Quim ("El Quim", como se dice en Barcelona), con quien acabamos degustando una rica Torta de Barros.
Arrancamos con unos gambones al ajillo y toque de cava, de delicada elaboración y justo punto.
Seguimos con un plato realmente fascinante, cuyo sabor no olvidaré : Risotto de rabo de toro, con remate de tirabeques. Gracias.
Casi por "orden" del maestro tuvimos que tomar unos huevos rotos con chipironcitos.......gran suerte la nuestra al vernos obligados.
Y faltaban los postres, donde la magia no terminó, y probamos una selección, con especial mención al tiramisú, la cobertura de chocolate con coco y mango o la tarta de herencia por la vía materna de Quim.
En fin, creo que a partir de ahora tengo visita fija y marcada cuando pase por Barcelona.....y si algún día pasara por Hong Kong, seguro que también al restaurante que van a abrir, con el hijo de Quim a los mandos
2 comentarios:
Muy de El Quim....
Un verdadero lujo. Sensacional concepto.
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