Crucero por fiordos noruegos y Escocia : Capítulo III. Flåm

29/07/2013

Segundo fiordo; tercer día por Noruega. En el fiordo de Aurland, una ramificación del Sognefjord, el más largo (204 km.) y profundo (1.300 metros) de los fiordos noruegos. Zona clave de la cría de salmón.

Flåm es conocido por su tren, ahora dedicado a actividad turística. Sin embargo, optamos como excursión la de visitar una fabulosa cascada, como la de Tvinde, y la verdad es que no nos equivocamos.

Para llegar allí, atravesamos los dos larguísimos túneles (5 y 11 km.) que desde 1990 permiten acceder a Flåm por carretera (antes era algo parecido a un camino de cabras). Al llegar, entendimos su nombre, proveniente del inglés twin : Tvinde; arrancan dos cascadas paralelas que se unen, para más abajo volver a separarse en dos. Impresionante a la vista, especial al oído. Ni la leve llovizna que cayó impidió la mágica escena.

Tras más de media hora allí, nos encaminamos al hotel Stalheim y sus grandes vistas. Se trata de un histórico hotel de montaña, donde se puede admirar un museo y curioso mobiliario. Como ya he dicho, las vistas impresionantes. Como el día de Geiranger, un té y unos dulces (incluso más ricos que los del día anterior) nos permitieron reponer fuerzas.

Bajamos por una serpenteante y empinada carretera (18% de pendiente), y admiramos dos imponentes cascadas. Antes de volver a Flåm, parada en Gurvanden, donde nace el más estrecho de los 109 fiordos de Noruega.

Paseo por Flåm, alguna compra, ver el tren y remate con una cerveza artesanal (no precisamente barata) elaborada allí mismo : Aegir Brewery & Pub, un auténtico placer para los cerveceros.

En este día de excursión, pudimos ver unos inmensas rocas en uno de los caudalosos ríos vistos, que según nos relató la guía, la leyenda dice que son trolls petrificados, al darles la luz solar. También nos mencionó la "existencia" de huldras, unas bellas doncellas que sólo eran descubiertas al levantar la falda y encontrar un rabo de vaca, y que se dedicaban a seducir a los hombres, recompensándoles o castigándoles según el caso.